domingo, 22 de agosto de 2010

¿QUE ES IFA?

Influenciado por el Islam y el Cristianismo, el presente Yoruba se inclina por dejar de lado la idea de Ifa como curanderismo o idolatría.  De esta manera traiciona una ignorancia que contrasta profundamente con la erudita actitud de los Reverendos Samuel Jonson, E. Lijadu y Bishop James Jonson, el Doctor J. O. Lucas y el Profesor E. Bolaji Idowu, quienes florecieron una generación anterior a la nuestra.  Es de interés notar que estos pioneros de los estudios Yoruba fueron sacerdotes ordenados de la Comunión Anglicana, quienes sin embargo, han liberado sus mentes de sus prejuicios cristianos lo suficientemente bien como para emprender una investigación acerca de los méritos de su cultura nativa.
Felizmente el buen trabajo que ellos iniciaron ha generado un loable entusiasmo en académicos yoruba distinguidos como el Dr. Wande Abimbola, los Profesores Ayo Bamgbose, Olabimtan, Afolabi Yemitan, G. Afolabi Ojo y el Dr. J. O. Awolalu.  La cultura Yoruba ha sido analizada con no menos entusiasmo y erudición por sociólogos y etno-historiadores tanto europeos como americanos.  Gracias a todos estos estudiosos los “Estudios Yoruba” han ganado reconocimiento académico no solo en las universidades nigerianas sino también en universidades extranjeras como una disciplina tan meritoria como lo son los estudios clásicos y modernos.
Mi propósito aquí es complementar, humildemente, el estudio general llevado tan lejos con una profundización y una presentación analítica de un aspecto de la cultura Yoruba -Ifa.
El tardíamente respetado conocedor de Ifa, antropólogo americano, Dr. William Bascom, escribió en su monumental trabajo acerca del tema de la siguiente manera:
“Ifa es un sistema de adivinación basado en 16 figuras básicas y 240 figuras derivadas (ODU) que se obtienen, bien mediante la manipulación de 16 nueces de palmera (Ikin) o bien, lanzando una cadena (Opele) de 8 medias conchas.”
Autorizado, objetivo y comprensible, el trabajo del Dr. Bascom es probablemente la última palabra en cuanto a lo que se refiere a Ifa como sistema adivinatorio
Éste, simplemente es un intento de presentar el culto de Ifa, el cual según las palabras del Dr. Bascom
“Reúne ceremonias, sacrificios, tabúes, parafernalia, tambores, canciones, alabanzas, iniciación y otros elementos rituales comparables a todo el resto de los cultos Yoruba.” 
En esta tarea será necesario discutir el origen y la práctica del Ifa y evaluarlo como una filosofía total.
1. Origen
Hay dos puntos de vista centrales a considerar:  el tradicional y el analítico.
1-1: La Visión Tradicional
Combinando mito, leyenda y etimología popular, la mirada tradicional afirma categóricamente que “Ifa es el mensaje de Dios para toda la humanidad”.
1-1.1  La Visión Tradicional: El Mito.
En el mito establece que, este mensaje que todo lo abarca, fue traído a la humanidad por el profeta Orunmila, quien empezando por la anciana ciudad de Ife, esparció la palabra de Dios por todo el mundo. 
El Jefe S. O. Atanda, Sacerdote de Ifa y Asiwaju Awo de Lagos fue insistente acerca de esta misión divina de Ifa:
“Ifa ni oro enu Olodumare”
TRADUCCIÓN:
“Ifa es la palabra que procede de la boca del Omnipotente”
El Jefe Fagbemi Ajanaku, Araba (Sacerdote Jefe de Ifa) de Lagos confirma esta afirmación:
“Ki ni wa nje Ifa papa? Ifa ni akojopo oro Olorun to fi ran Orunmila si
  awon eda aye”
TRADUCCIÓN:
“¿Y qué es Ifa en sí mismo? Ifa es la totalidad del mensaje de Dios para
la humanidad enviado a la Tierra a través de Orunmila”
El Dr. Wande Abimbola, caballero universitario e investigador de Ifa, ha resumido la mirada tradicional de la manera más sucinta de ese modo:
En la mitología Yoruba se cree que Ifa es una de las mayores divinidades y que ha descendido del Orun (más allá) en la Ciudad de Ife por medio de una cadena de hierro.  Otra versión de la historia acerca de la ocupación de Ife por las divinidades plantea que arribaron allí bajo el mando de Ogun quien con su espada labró un sendero a través del cual debían realizar el camino hacia Ife.
Cada una de las divinidades que llegaron a Ife llevaba una misión especial dada por Olodumare, el Dios Yoruba más alto.  Ifa fue encargado del deber de moldear la joven Tierra usando su profunda sabiduría y entendimiento.  Ogún, la divinidad del hierro fue encargado de usar su extraordinario poder físico, bravura y valentía para afrontar todos los problemas bélicos y heroicos... La posición principal de Orunmila por encima de las divinidades deriva de su sabiduría y conocimiento.  Se cree que él estuvo presente cuando el universo fue creado por Olodumare.  Este conocimiento, en consecuencia, trasciende todo tiempo (pasado, presente o futuro) y espacio.  Los Yoruba también creen que Ifa fue testigo de todas las decisiones de los hombres acerca de su destino.  Por ende, es necesario recurrir a él siempre que se quiera descubrir el verdadero camino en el destino de una persona.
Este mito tradicional es referido por C. O. Ibie en su interesante aunque controversial libro Ifism y citado en esencia por el Jefe Fagbemi Ajanaku en su valiosa contribución para el libro Iwe Asa Ibile Yoruba editado por O. Olajubu.
Suficiente acerca del mito.  Ahora veamos la leyenda.
1-1.2:  La Mirada Tradicional:  Leyenda
La leyenda relata la vida y los trabajos de Orunmila, éste considerado como un ser humano.  En estos términos, se considera que Orunmila ha vivido en la Ciudad de Ife y que más tarde ha predicado su mensaje por todo el resto de la Tierra Yoruba y más allá.
“En este periodo del pasaje de Ifa en Ife escribe el Dr. Abimbola él vivió en un lugar conocido como Oke Igeti.  Es por eso que uno de los nombres con que se lo alaba o enaltece es Okunrin kukuru Oke Igeti (el pequeño hombre de la Colina de Igeti).  Luego de una larga estadía en Ife, Orunmila se trasladó a Ado.  Se cree que Orunmila ha pasado la mayor parte su vida en la tierra de Ado”.
Los sacerdotes de Ifa/Orunmila (Babalawos) de hoy día demandan una sucesión Apostólica directa de él.  Debajo se expone la versión del Dr. Abimbolá de la leyenda en la que se apoya esta demanda:
“Orunmila tuvo ocho hijos y un número de discípulos a todos los cuales les enseñó los secretos de la adivinación. Todos ellos crecieron para ser importantes personas y luego se dispersaron por diversos sectores de la Tierra Yoruba.  Finalmente, Orunmila regresó al más allá (¿) disgustado debido a un insulto que recibió de uno de sus hijos.  Poco tiempo después de sucedido esto, la Tierra fue arrojada a una gran confusión.  Hambre y pestilencia rasgaron la Tierra en toda su magnitud”. 
“Después de algún tiempo la gente de la Tierra decidió buscar remedio a las privaciones que estaban pasando mandando a los ocho hijos de Orunmila al más allá a rogar a su padre que regresara a la Tierra.  En conformidad, sus hijos fueron allí.  Cuando llegaron al más allá encontraron a Orunmila al pie de la palmera tantas veces escalada la cual se ramificaba hacia este camino y que hasta tenía dieciséis ramas formando cobertizos.
Rogaron a Orunmila que volviese a la Tierra pero él se negó.  De todos modos él les dio a sus hijos dieciséis nueces de palmera y les dijo:
“Todas las cosas buenas que quieran ustedes tener en la tierra ustedes son las personas a las que hay consultar”.
“Cuando los hijos de Orunmila regresaron a la Tierra comenzaron a utilizar las dieciséis nueces de palmera para adivinar.  Las dieciséis nueces de palmera fueron el símbolo de la autoridad de Orunmila para que sus hijos continuaran realizando la adivinación en su nombre.  Las dieciséis nueces de palmera, conocidas como Ikin, han sido utilizadas como una parte importante de la adivinación desde ese momento hasta el presente.  La ausencia de Ifa (Orunmila) en la Tierra ya no fue más una preocupación desde que a sus hijos les fue posible comunicarse con él a través del Ikin y otros instrumentos adivinatorios”.
Estos relatos arriba expresados constituyen el centro de la visión tradicional acerca de Ifa y pueden encontrarse, con variaciones menores, en los trabajos de
E. M. Lijadu (1908): Ifa, Orunmila;
D. O. Epega (sin fecha): Ifa Amona awon Baba wa;
D. O. Epega (1971): Yoruba Religión;
P. O. Ogunbowale (1962): Awon Irunmale Ile Yoruba;
C. O. Ibie (1986): Ifism.
Pero ¿qué podemos decir acerca del maestro del sistema, el Profeta de Ifa, Orunmila, quien ciertamente fue un hombre de carne y hueso?
“Algunas tradiciones afirman”, escribe Awolalu, “que Orunmila, a pesar de ser una de las divinidades primordiales ha sido un ser humano.  Su ascendencia es incierta y en consecuencia, el nombre de su padre es conocido con algunas variaciones como Jakuta, OROKO o Agbonniregun y el de su madre como Alajeru.  De acuerdo con este mito, tradicionalmente, el hogar de los padres de Orunmila es Ife, desde donde él partió a recorrer el mundo (¿territorios yorubas?) enseñando a los hombres su sabiduría”...Sacralizando de esta manera los bosques y tierras yorubas, lugares considerados especialmente sagrados por algunos linajes africanos para la realización de elevados ritos iniciáticos en Ifá.
No sé de autoridad alguna en Ife que pueda validar esta afirmación de Awolalu acerca de la ascendencia de Orunmila.  Prima facie, la información dada por el mito es incorrecta:  Jakuta es la anciana divinidad Yoruba del trueno, relacionada al culto a Sangó y no al Ifa.  Agbonniregun, como veremos más adelante en este capítulo, es un nombre alternativo para Orunmila mismo.
Lo que emerge de estas historias es que podemos aceptar, sin temor a equivocarnos que los versos de Ifa que narran el trabajo misionero de Orunmila en la Tierra, nos permiten vislumbrar al hombre de carne y hueso, mientras que aquellos versos que lo describen como la primordial divinidad que descendió en la Tierra pertenecen al mito.  Pero la división nunca es lo suficientemente clara.  Entonces, necesariamente cualquier descripción de este héroe-divinidad deberá contener ambos elementos como tan claramente se ilustra en los Oriki de Orunmila (nombres de alabanza) expresados debajo:
Orunmila, Eleri-Ipin
Ibikeji Olodumare
Aje-ju-Oogun,
Oluwa mi a-to-bajaye
Oro a-biku jigbo
Ogege a-gbaye-gun
Odudu ti ndu ori emere
A-tun-ori-ti-ko-sunwon-se
A-mo-iku
Olowa-ayere
Agiri-ile-il´ogbon,
Oluwa mi a-mo-tan
A ko mo o tan, ko xe
A ba mo o tan, iba xe
TRADUCCIÓN:
Orunmila, testigo de las decisiones de los hombres acerca de su destino
Vice-gerente del Gran Omnipotente
Tu arte lejanamente más eficaz que la magia
Tu arte la inmensidad que aparta el día de la muerte
Mi señor, el salvador más poderoso,
Misterioso poder que desafió y derrotó a la muerte
A ti es nuestro deber saludarte cada mañana
Tu arte el Equilibrio que pone al Diablo al favor de Dios.
Señor compasivo que cambia la fortuna del hombre de mala a buena,
Conocerte es volverse inmortal.
Señor cuyo reino no tiene final,
Perfección de sabiduría,
Infinidad de conocimiento.
Una devoción imperfecta hacia ti lleva a la futilidad,
Señor, si tan solo pudiésemos conocerte a ti completamente
¡Cuán tranquila sucedería nuestra vida!
Aquellos lectores que posean un buen Yoruba encontrarán en los comentarios de Lijadu acerca del oriki de Orunmila un muy gratificante ejercicio.
El texto Yoruba de Fagbemi Ajanaku del cual realizo la traducción abajo está también muy conectado con el tema.
¿Y quién fue Orunmilá en sí mismo?
Orunmila fue uno de los profetas de Olodumare/Dios, probablemente el más amado por él.  Él fue el emisario especial de Olodumare/Dios para todas las criaturas de la Tierra, no solo para la humanidad ya que Orunmila entendía el lenguaje de las bestias, los pájaros y los hombres.  
Orunmila fue único por sobre los profetas a quienes el Omnipotente dotó con el poder de las palabras.  Y es un resultado de las enseñanzas de Orunmila el que los Orisas, las divinidades que hoy adoramos, se convirtieran en dioses a quienes toda la humanidad mantienen en siempre viva reverencia.
Todas las divinidades fueron seres humanos alguna vez en la Tierra pero debido a que siguieron los caminos de Olodumare/Dios se convirtieron en personas especiales dotadas del patronato del Omnipotente.  Es por ello que los hombres pedimos al Omnipotente sus favores en sus nombres como intercesores.
Existe un verso Ifa DEL Odu Eji-Ogbe que prueba inequívocamente que los Orisas, las divinidades verdaderamente, fueron seres humanos.  Aquí está:
Orunmila dice:  Son seres humanos aquellos que devinieron en Orisas 
Yo replico: Verdaderamente así es mi Señor, Agbonmiregun
Los Orixas son seres humanos.
Orunmila dice:  Orisanla, debes saber, fue él mismo, un ser humano
Fue cuando trajo bendiciones para el mundo, los hombres
Comenzaron a venerarlo como a un Dios
Aún en estos días los hombres reverencian su memoria y 
suplican al Omnipotente en su nombre.
Ogun fue una vez un ser humano.
Sangó fue una vez un ser humano.
Y, entonces aquellos que alcanzaron la sabiduría en la
Tierra
Y, ellos son, verdaderamente, a quienes nosotros adoramos
Como a Dioses...

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